World Soundtrack Awards 2016 – Resumen festival
Llega el momento de hacer recapitulación y balance del festival World Soundtrack Awards 2016, celebrado en Gante (Bélgica) los días 19 y 20 de Octubre, aunque complementado con actos adicionales los días 17 y 18, y que tiene lugar dentro del Film Fest Gent, su hermano mayor, que ha venido a ocupar las fechas del 11 al 21 de octubre.
Mi intención con este artículo es hacer un repaso lo más completo posible de cómo ha transcurrido el festival, y poder dar una idea de cómo ha sido para aquellas personas que no hayan estado en el lugar, y que puedan tener dudas sobre acudir en futuras ediciones.
Por ello, aunque el año pasado era mi primera vez en el WSA y sólo estuve un par de días, esta vez planifiqué mi viaje con más tiempo, para poder estar los 4 días principales del festival.
DIA 1 – LUNES 17/10/16 - INDUSTRY DAY y CONCIERTO GOSSES DE TOKYO
El primer día del World Soundtrack Awards comenzaba intensamente, con una jornada completa dedicada a charlas y conferencias sobre aspectos relevantes de la industria de la música de cine, que bajo el nombre Industry day, iba a tratar temas tan interesantes como la propuesta Europea sobre la ley de copyright, la función de los supervisores musicales o la colaboración entre el compositor de una serie de TV y el equipo creativo.
Desafortunadamente en mi caso (como en el de muchas otras personas), el lunes era día de viaje, de transición, con lo que para cuando llegué a Gante ya habían finalizado las sesiones. Creo que no es muy buena idea poner un Industry day el primer día de festival, ya que eso da lugar a muchas ausencias, aunque de este punto ya hablaré con más detalle al final del artículo en el apartado resumen.
Por la noche, a las 20h, acudí un evento que inicialmente no estaba en mi agenda, pero que había llamado mi atención, la proyección de la película japonesa muda y en blanco y negro de 1932, Gosses de Tokyo (traducida al inglés como “I Was Born, But…”) del director Yasujiro Ozu, con música interpretada en directo.
Con una banda sonora compuesta por el belga Gwenaël Grisi, la cual le había sido encargada por el festival Ars Musica junto con el Film Fest Gent, se contó en escena con 5 músicos; piano, chelo, clarinete, percusión y violin/viola, que ponían la banda sonora a la película en directo.
He de decir que tanto la película como la música me sorprendieron gratamente. Para ser una película muda y de los años 30, esperaba algo más exagerado en su realización y más sobreactuado, pero me encontré con una dirección impecable, con planos muy descriptivos y bien enlazados, y unas interpretaciones muy logradas que transmitían muy bien las dos vertientes de la historia en torno a la familia protagonista, la cómica y la dramática, dando lugar a una película enormemente recomendable.
La música, bien ayudaba en la narración de la historia, como bien jugaba y apoyaba las imágenes con efectos sonoros en ocasiones (interesante el uso del tambor metálico incorporado en la percusión), y resultó fresca, expresiva y muy descriptiva.
Todo un acierto de evento, tanto por rescatar del archivo una película fabulosa, como por añadirle una banda sonora viva y de calidad, que aportaba matices muy interesantes a las imágenes.
DIA 2 – MARTES 18/10/16 - FILM MUSIC SEMINAR
Ya en el segundo día, el plato fuerte iba a ser el evento Film Music Seminar, a celebrarse en la sala principal de los cines Kinepolis, de 9:30h a 16:30h con pausa para la comida, y al cual se podía acceder previa compra de entrada por 20€.
Este evento se dividió en varios paneles/conferencias, donde los compositores, bajo la moderación de la investigadora y doctora en música Martine Huvenne, iban hablando de los diversos temas que se les planteaban e iban comentando los vídeos mostrados en la pantalla de la sala de cine, dando lugar al final de cada charla a una sesión de preguntas y respuestas con el público asistente.
El primer panel fue con los compositores Jeff Beal y Jeff Russo, los cuales comentaron sus comienzos y sus carreras como músicos antes de dedicarse a componer para cine y TV, y hablaron de algunos de sus principales trabajos; la película Pollock y House of Cards en el caso de Jeff Beal y la serie Fargo en el caso de Jeff Russo.
Una idea que me pareció muy interesante, fue lo que dijo Jeff Russo a la hora ser preguntado por la forma de abordar la interlocución y directrices musicales en un proyecto: “Las películas son la visión del director, mientras que en serie es la visión del escritor, por lo que las personas con las que hay que tratar, cambian”.
Posteriormente, llegó el momento del descanso y de la comida en una sala accesoria al cine, donde se pudo charlar con el resto de asistentes al seminario, que en gran mayoría eran estudiantes y/o aspirantes a compositores o directores, y donde también estuvieron los compositores, accesibles a cualquier pregunta fuera del programa.
Tras la pausa, era el turno de la conferencia de Ryuichi Sakamoto, el invitado principal del festival, que llegó ligeramente tarde, y que durante 1h de conferencia habló de su primer trabajo en Merry Christmas Mr Lawrence, al cual se incorporó sin experiencia como compositor de cine y aterrado por afrontar un proyecto tan importante, pero que solventó muy bien y donde además tomo parte como actor. Medio en broma medio en serio, llegó a decir que intentó compensar su mala actuación en la película, llenando de música lo que no pudo expresar como actor.
Después, habló de su colaboración con Bernardo Bertolucci, principalmente en El Último Emperador, y de cómo fue llamado para interpretar un papel en la película, que luego cambio sustancialmente según se modificó el guion. Cuando la película estaba casi terminada y ya había hecho su trabajo como actor, recibió la llamada de Bertolucci pidiéndole componer la música, dándole ¡1 semana de plazo para hacerlo!
Así, dejó todos sus compromisos de los próximos 6 meses y se puso a componer, llevándole en una semana a Bertolucci unas maquetas grabadas con músicos reales, de las cuales el director descartó casi el 50%. También comentó como curiosamente casi toda la música con estilo oriental en la película es de David Byrne, mientras que la que tiene estilo más occidental es suya, aunque la gente tiende a pensar lo contrario.
Una charla muy interesante, donde tras la ronda de preguntas del público, Sakamoto abandonó la sala entre aplausos y con prisa por acudir a su siguiente compromiso, dando paso a la última conferencia del día con el compositor danés Karsten Fundal y el director Johan Grimonprez.
A lo largo del seminario, se pudo ver desfilar por la sala a otros compositores invitados del festival como Mac Quayle o Ben Lovett, que asistieron a las conferencias como una persona más del público.
DIA 3 – MIERCOLES 19/10/16 - MEET & GREET y WSA GALA CONCERT
Hoy miércoles llegaba el día fuerte del festival, con una sesión de Meet & Greet por la mañana (un “conoce a los compositores”), para tener la gala-concierto con entrega de premios a la noche.
El Meet & Greet estuvo precedido de una rueda de prensa, a la que se accedía únicamente por invitación, si bien era posible solicitar un pase por correo electrónico a la organización, y fueron varias las personas que no siendo prensa pudieron entrar.
La rueda de prensa con los invitados principales se celebró en el edificio del ayuntamiento, en el salón de plenos, un lugar muy noble, que daba la sensación de estar en un parlamento o en un senado, o como jocosamente alguien comentó, una sala de juicios donde se juzgaba a los compositores por sus pecados.
En la rueda de prensa pudimos ver a Daniel Pemberton, John Lunn, Ryuichi Sakamoto, Dirk Brossé, Jeff Beal, Sean Callery y Jeff Russo con la ausencia de Alex Heffes, que había sido anunciado pero no pudo acudir. Entre el público, otro buen lote de compositores, como Mathew Margeson, Mac Quayle, Nicholas Britell o Ben Lovett entre otros (candidatos en algunas de las categorías de los premios que se iban a entregar por la noche).
Con el director artístico del festival Patrick Duynslaegher moderando la rueda de prensa y realizando las primeras preguntas para establecer un pequeño debate, después se abrió el turno de preguntas a las personas de la sala, y puesto que no había podido obtener una entrevista con Ryuichi Sakamoto debido a su apretada agenda, aproveché para lanzar una pregunta que no se había tocado en su charla del día anterior.
Mi pregunta era más bien curiosidad, por su trabajo en la película Tacones Lejanos (High Heels), con el conocido director Español Pedro Almodóvar. Sakamoto comentó que recibió una llamada de la oficina de Pedro Almodóvar, diciéndole que quería que hiciera la música de su próxima película, así que cogió un avión a Madrid y se reunió allí con el director. Estuvieron cenando y luego hablando del proyecto, y se tiraron hablando toda la noche sin dormir. Sakamoto, que estaba con el Jet Lag, no se dio cuenta de los horarios, pero cuando se hizo de día se asombró y pensó que vaya gente más rara son los españoles que no duermen, a lo que Almodóvar le respondió que la creatividad no tiene horarios.
Tras esa charla inicial, Sakamoto estuvo interesado en el proyecto y lo aceptó, y contó que tuvo libertad absoluta para componer la música que él quisiera y darle el enfoque que considerara necesario. La única directriz que le dio Almodóvar fue que la música tuviera un toque o esencia español, sin caer en el cliché, pero que tuviera esa esencia que se desprendía en la película. De la música que compuso inicialmente, aproximadamente el 60% fue aceptada y se incorporó a la película y el resto o hubo que modificarla o no llegó a la película, lo cual Sakamoto consideró que es algo bastante habitual.
Una vez terminado el turno de preguntas, se dio por finalizada la rueda de prensa y se pasó a la sesión de firmas con los invitados, haciendo una cola con las pocas personas que estaban en la sala, que se despachó bastante rápido.
Y así, terminó la mañana y se dejó paso al evento central del World Soundtrack Awards, la noche de gala y concierto.
El lugar para la celebración del mismo había cambiado del año pasado, siendo ahora el Capitole Ghent, un teatro con una capacidad para unas 1900 personas, en vez del Kuipke Ghent, un velódromo con capacidad para 3000 personas (aunque en realidad no se utilizaban todos los asientos, por el espacio que ocupaba el escenario en el velódromo).
La noche arrancó pasadas las 20h con la World Soundtrack Awards Fanfare (Elmer Bernstein) y la entrega del premio Sabam Award a la composición original de jóvenes compositores internacionales. Aquí, se mostraron tres obras seleccionadas entre un total de 73 participantes, que ponían música a los títulos de crédito de la serie de televisión El Santo (The Saint).
Tres composiciones muy interesantes, con algunos puntos similares pero con ideas frescas y originales, donde resultó ganador el compositor turco Sándor Török, que se llevó un premio de 2.500€ por su trabajo.
Posteriormente, se pasó a la entrega de premios del resto de categorías, donde Carter Burwell arrasó en 3 de los premios (2 elegidos por el jurado y 1 elegido por el público), quien no pudiendo estar en la sala para recogerlos, fue mandando un video-mensaje de agradecimiento tras otro, cada vez más divertidos y cada vez más apenado por no poder estar en persona en Gante.
Esta fue la relación completa de ganadores anunciada en la gala:
Destacar el final de la entrega de premios, donde Ryuichi Sakamoto fue presentado en el escenario por su colega y colaborador Alva Noto, y dio un discurso que finalizó diciendo “La música es muy importante en las películas, pero sin embargo el compositor muchas veces llega al final del proceso, sin tiempo para componer. Por favor, den más tiempo a los compositores, más espacio para la creatividad y más dinero!”. Un final de discurso valiente e interesante, que arrancó un gran aplauso en la sala.
Seguido, y tras casi 50 minutos de la noche empleados en la gala, comenzó la parte del concierto dedicada a la música de Ryuichi Sakamoto, y lo hizo con el tema The Last Emperor (1987) – Endroll, con la participación de 3 músicos con instrumentos tradicionales chinos en escena para después pasar a High Heels (1991 – Tacones Lejanos) – Main Theme y continuar luego con Femme Fatale (2002) – Déjà Vu II, que resultó francamente aburrido, tanto musical como visualmente, y que rompió un poco el ritmo de las dos piezas anteriores.
A continuación, Ryuichi Sakamoto subió al escenario entre aplausos y se puso al piano para interpretar junto con la Brussels Philharmonic Orchestra dirigida por el maestro Dirk Brossé la pieza Merry Christmas Mr Lawrence (1983) – Main Theme, donde la cámara mostraba las manos del compositor mientras tocaba el piano al principio, pero luego desviaba la atención a la orquesta más de lo necesario, cuando el protagonismo debiera haber estado en el invitado principal.
Y así, cuando llevábamos poco más de una hora de concierto, se dio paso a un intermedio de 20 minutos, para continuar la velada sobre las 21:45h.
La segunda parte del concierto fue temática y dedicada a la música de televisión, arrancando con Doctor Who – I am the Doctor (Murray Gold) y que fue el primer momento de la noche en el que se incorporó el fabuloso coro Flemish Radio Choir, para luego dar paso a The White Queen – Suite (John Lunn), que se encontraba en la sala y recibió el aplauso del público.
Seguido, un solista salió a escena para apoyar la pieza Roots – Suite (Alex Heffes), que se entregó en su interpretación, especialmente al final del tema que tuvo mucha fuerza y fue muy bien recibido por la audiencia.
Y después llego a mí parecer uno de los mejores momentos de la noche, ya que el galardonado Jeff Beal, salió a escena con 2 trompetas diferentes para acompañar a la orquesta en la interpretación de House of Cards – Suite (Jeff Beal).
La primera parte de la suite se correspondía con los títulos de crédito, y allí utilizó la primera trompeta, más solemne y de sonido fuerte, para después cambiar a la segunda trompeta con un sonido más cálido cuando la suite derivó en un momento delicado de la serie, que implica la muerte de un personaje querido por los protagonistas. Una suite maravillosa, con una interpretación magistral de Jeff Beal a la trompeta, jugando con los tonos y con las notas, y arrancando el llanto a la trompeta, como no recuerdo haber visto en otro concierto.
El siguiente tema fue Parade’s End – Reunited & Song for Peace (Dirk Brossé), donde una soprano vestida de rojo hizo aparición para acompañar a la orquesta, dando después paso a dos piezas de Upstairs Downstairs – 165 Eaton Place & Lotte Sent Away (Daniel Pemberton), que sonaron francamente bien y donde el compositor puesto en pie, recibió el aplauso del público.
Seguido, se pasó a Mad Med – Suite (David Carbonara) para luego subir Jeff Russo a escena y ponerse a cargo de la batería en las piezas Fargo – Main Theme & Peggy Watches TV & Rye’s Theme (Jeff Russo), que tuvieron un ritmo muy interesante y muy buena interpretación.
La siguiente parte fue para mí el mejor momento de la noche y casi diría que del festival, ya que para tocar Homeland – Suite (Sean Callery), se contó con un reparto de lujo; Sean Callery al Piano, Jeff Beal a la trompeta, Jeff Russo a la batería, Benoît Grey al bajo, y el acompañamiento del guitarra eléctrica de la orquesta. Con la orquesta en silencio, y con un Sean Callery entregado marcando las entradas a sus compañeros con el piano, Jeff Russo estuvo espléndido a la batería aportando ritmo y calidez de manera alterna, mientras que Jeff Beal volvía a demostrar que domina la trompeta a su antojo, en las desgarradas y sentidas notas que evocan los pensamientos de la protagonista de la serie. Una suite de lujo, con un reparto de lujo, sólo por la cual merecía la pena toda la noche.
Abordando la recta final del concierto, la orquesta con la participación del coro se puso manos a la obra con la pieza The Leftovers – Concert Medley (Max Richter) que tuvo mucha fuerza y una sólida interpretación, para acabar la noche con Sherlock – Suite (David Arnold & Michael Price), en una suite ágil y bien estructurada.
Al final, volvió a sonar el World Soundtrack Awards Fanfare (Elmer Bernstein), y sin opción a ningún bis, con los compositores y solistas sobre el escenario recibiendo sendos ramos de flores, la velada terminó casi 3h después de su comienzo.
Un concierto que tuvo una segunda parte muy buena, pero una primera parte algo floja, tanto por la entrega de premios que redujo el ritmo, como por la música interpretada que no consiguió entusiasmar a la audiencia.
DIA 4 – JUEVES 20/10/16 - WSA CONCERT
Por la mañana, fue momento de descansar un poco tras tres intensos días de festival, aunque también aproveché para realizar algunas entrevistas con los invitados, que en breve espero poder ir publicando en SoundTrackFest.
Y por la noche llegó el momento del concierto, a las 20h, donde esta vez había un lleno completo del Capitole Ghent (de hecho, las entradas estaban agotadas hacía tiempo, cosa que no había pasado el día anterior, a pesar de haber más invitados en la sala con motivo de la gala).
Antes de pasar a relatar al concierto, indicar que hoy me encontraba situado en las filas más cercanas al escenario (fila 7 frente a la fila 19 de ayer), y la verdad es que la diferencia era enorme. Había una mejor visibilidad del escenario, que tenía montadas 3 enormes pantallas sobre el mismo (una central y dos en diagonal junto a esta) y la ausencia de las pantalla de plasma que había en los laterales del teatro a partir de la mitad de la sala, era de agradecer (estas pantallas, a lo largo de la función, se empeñaban en mostrar imágenes de la orquesta, y no hacían más que iluminar de pronto una sala oscura, resultando francamente molestas en muchas ocasiones por los cambios de luz).
El concierto arrancó con una primera parte dedicada a series televisión antiguas, siendo la primera pieza una Suite de varias series de televisión de Jerry Goldsmith (The Man From Uncle, Dr Kildare, The Waltons y Barnaby Jones) que pusieron el tono retro a la velada, mientras se proyectaban imágenes y vídeos de las series en la pantalla central (las laterales estaban reservadas para enfocar y seguir a los músicos y al director).
Seguido se interpretaron Dinasty (1981) – Main Theme (Bill Conty), Star Trek (1966) – Theme (Alexander Courage) con una soprano, Mission Impossible (1966) – Main Theme (Lalo Schifrin) y Hawai Five-O (1968) – Theme (Morton Stevens), y fue cuando se pudo ver la maestría de la orquesta bajo la hábil y precisa batuta de Dirk Brossé.
En la siguiente pieza, pocas veces escuchada en concierto, se contó con el apoyo del coro para interpretar Moses (1974) – Theme (Ennio Morricone) que tuvo una muy buena acogida, y dio paso a un momento de color y diversión con The Simpsons (1989) – Theme (Danny Elfman).
Después, la hipnótica y fabulosa música de Twin Peaks (1990) – Main Theme (Angelo Badalamenti) inundó la sala, cediendo el turno a la interesante y bien interpretada Wild Palms (1993) – Main Theme (Ryuichi Sakamoto), esta vez sin la presencia del compositor en el lugar.
Cuando parecía que era momento del intermedio, la función continuó sin descanso con Band of Brothers (2001) – Main Theme (Michael Kamen), con un coro increíble que apareció tras las dos pantallas laterales del escenario, y que logró poner los pelos de punta mientras vídeos e imágenes proyectados en la pantalla central, recordaban los momentos épicos de esta fantástica serie.
Y entramos en lo que se podría decir que era la segunda parte del concierto, puesto que a partir de aquí el programa era muy similar al del día anterior, con alguna ligera omisión.
Primero se interpretó Mad Med – Suite (David Carbonara) para luego subir nuevamente a escena Jeff Russo y ponerse a cargo de la batería en las piezas Fargo – Main Theme & Peggy Watches TV & Rye’s Theme (Jeff Russo).
Y saltándose el programa previsto, y debido al éxito del día anterior, llegó un extra donde Sean Callery, Jeff Beal, Jeff Russo y Benoît Grey tomaron nuevamente al escenario para interpretar Homeland – Suite (Sean Callery), que fue nuevamente el gran momento del concierto, y que debido a la naturaleza jazzística del tema, tuvo ligeras y estupendas variaciones con respecto lo escuchado ayer. ¡Impresionante!
Después, se dio paso a Parade’s End – Reunited & Song for Peace (Dirk Brossé) con soprano y posteriormente Roots – Suite (Alex Heffes) con solista igual que el día anterior, para luego ceder el testigo a Jeff Beal con House of Cards – Suite (Jeff Beal), nuevamente con una maravillosa interpretación.
Para acabar la noche llegaron The Leftovers – Concert Medley (Max Richter) y Sherlock – Suite (David Arnold & Michael Price).
Así, con algo menos de 2h con respecto al comienzo, se dio por terminada esta fantástica velada. Como conclusión, diría que me gustó más y me pareció más redondo el concierto del jueves que la gala-concierto del miércoles, ya que la primera parte aportó un toque de nostalgia y la posibilidad de rescatar la música de series de televisión que no se escuchan con facilidad, y la segunda parte aportó lo mejor del concierto del día anterior.
EN RESUMEN
Terminando este extenso artículo, llega el momento de hacer balance, de revisar los puntos fuertes y los puntos de mejora del festival, y aportar ideas y sugerencias en positivo.
Puntos a mejorar:
Fechas. Las fechas de celebración de los conciertos, miércoles para la gala-concierto y jueves para el concierto, han sido bastante desafortunadas por caer en días laborables entre semana. Además, el hecho de que el Industry day haya sido un lunes, el primer día en el que todavía mucha gente estaba en tránsito, ha dado lugar a muchas ausencias. Está claro que las fechas del WSA vienen marcadas por el Film Fest Gent, pero dentro de las posibilidades, habría que intentar “empujarlas” un poco más hacia el fin de semana, bien atrasándolas o bien adelantándolas, así como intentar reubicar el Industry day a una fecha más propicia.
Accesibilidad. Ryuichi Sakamoto ha estado inaccesible la mayoría del tiempo del festival para el público en general y para sus fans. Ha cumplido su calendario y su agenda, pero lo justo, sin contacto más allá de lo estrictamente necesario. Otros festivales europeos con invitados importantes (y pongo los ejemplos recientes de Howard Shore en Fimucité o Alexandre Desplat en Hollywood in Viena), son más permeables a este tipo de contactos, pero no aquí, donde la barrera está muy marcada (demasiado en ocasiones). Creo que este es un punto que habría que mejorar y flexibilizar, para generar cercanía y empatía en el público, y no dar una sensación de elitismo.
Fans. Se han echado en falta a los fans de la música de cine/TV. Por poner un ejemplo, diré que el día del Film Music Seminar, al terminar la charla de Jeff Beal y Jeff Russo, dos compositores de renombre que mucha gente que acude a un festival como este debería estar deseando llegar a conocer, con una sala de más de 120 personas, menos de 5 se acercaron a los compositores a intercambiar un par de frases con ellos, sacarse alguna foto o pedir alguna firma.
De hecho, durante la pausa para la comida, en la que los compositores compartieron espacio con los asistentes a las conferencias (algo que fue un acierto), casi ninguna persona se acercó a ellos para hablar sobre sus trabajos o entablar conversación.
Parece que el WSA es un festival orientado al público en general, sin una atracción particular hacia los fans de la música de cine/TV. Con un poco de esfuerzo creo que esto se podría mejorar, y brindar más oportunidades a ese público, que hace las funciones de embajador de un festival o de un compositor, y redunda en publicidad para el evento.
Hermano mayor. El Film Fest Gent es el evento principal, y el World Soundtrack Awards viene a ser una parte del mismo. La sensación de estar bajo la sombra del festival de cine es muy grande, y de hecho, la programación y las fechas de este año han sido debidas a necesidades organizativas del hermano mayor, que han perjudicado la asistencia al WSA, poniendo los conciertos en un miércoles y un jueves, fechas muy malas para el público que viene de fuera.
Ausencias. Alex Heffes y Max Richter estaban anunciados de forma presencial en varios de los eventos del festival, pero al final no acudieron. No hubiera estado de más confirmar su ausencia de forma oficial, de manera que la gente no estuviera esperando hasta el último día a ver si de verdad aparecían.
Invitados. El número de compositores que circulaban por Gante ha sido mayor que el número de compositores que participaban en el seminario o en los encuentros. Así, se ha echado en falta alguna conferencia o charla adicional con ellos, por ejemplo con varios de los nominados presentes como Mathew Margeson, Mac Quayle, Nicholas Britell o Ben Lovett, que seguro tenían muchas cosas interesantes que contar, y que estuvieron en el festival pero que pasaron sin mucho protagonismo un poco “desaprovechados”.
Puntos fuertes:
Organización. La organización del festival es excelente, con todos los actos del mismo perfectamente planificados y coordinados, y los tiempos y horarios claros y cumplidos a rajatabla. Un equipo de profesionales muy grande y muy bien preparado el que hay en el WSA, que trabaja conjuntamente con el personal del Film Fest Gent.
Ubicación. El cambio del recinto de conciertos del lugar del año pasado, el velódromo Kuipke Ghent, al teatro Capitole Ghent ha sido un acierto, ya que la calidez y la acústica del lugar, es mucho mejor y da lugar a un mayor disfrute de los conciertos.
Además, el hecho de que la mayoría de eventos (conciertos, meet & greet, seminario), se celebren a una distancia cercana unos de otros, con la posibilidad de ir a pie dentro del núcleo urbano de la ciudad de Gante, es algo de agradecer.
Programa. El programa del concierto del jueves fue a mí parecer excelente, con la oportunidad de poder escuchar obras clásicas que difícilmente vamos a disfrutar en concierto. Así mismo, la película “Gosses de Tokyo” fue una sorpresa estupenda, algo así como encontrar una perla al abrir una ostra. Rescatar obras poco interpretadas y muy interesantes, podría y debería ser una de las premisas que marquen la programación del festival en futuras ediciones.
Compositores. Tener a varios de los compositores en escena interpretando sus propias piezas ha sido una maravilla y ha dado lugar a momentos impagables como Jeff Beal con su House of Cards o la banda al completo (cariñosamente “Sean & The Two Jeffs”), interpretando Homeland. Es un lujo que en pocos festivales se ha podido ver, y que espero que se pueda repetir en futuras ediciones, ya que ha sumado muchos puntos a los conciertos y ha generado una sensación de complicidad con el público muy positiva.