JOHN WILLIAMS – Berlín 2021 – Resumen concierto
Ayer jueves 14 de octubre de 2021, se celebró el primero de los tres conciertos que ofrecerá la Berliner Philharmoniker dirigida por el maestro John Williams, con un programa dedicado casi en exclusiva a su obra de cine.
Gorka Oteiza acudió a dicho concierto y nos lo cuenta en este artículo especial en exclusiva para SoundTrackFest.
NOTA: El artículo contiene “Spoilers” para quienes vayan a los conciertos del viernes 15 y sábado 16. 😉🎶
EL CONCIERTO (Jueves 14/10/2021)
Cuando en junio de 2021 se anunció que John Williams iba a dar tres conciertos en Berlín (Alemania) en octubre, dirigiendo a la Filarmónica de Berlín – Berliner Philharmoniker, la noticia nos pilló por sorpresa a todos. Es verdad que a principios de año en una entrevista a la BBC, Williams había dejado caer que pensaba volver en otoño a Europa si las cosas estaban mejor, posiblemente a Alemania, pero en aquel momento, todos pensábamos que esto era una simple declaración de intenciones y no algo qué podría ser una realidad cercana.
En aquellos momentos, a principios de 2021, la pandemia seguía muy activa y teníamos una Europa bastante cerrada a nivel de fronteras y en estado de alerta, con lo que el anuncio de Williams, aunque resultaba altamente gratificante, dejaba un montón de dudas. Dudas que, habría que esperar a que pasarán los meses para ser despejadas.
De los tres conciertos qué se anunciaron que John Williams iba a dirigir en Berlín, los dos primeros solo se ponían a la venta en un pack de suscripciones, que había que comprar conjuntamente con el resto de conciertos de la temporada. El tercer concierto, el del sábado, no se pondría la venta hasta agosto, y únicamente se vendería como concierto aislado. Esto permitía que tanto abonados habituales de la orquesta como resto de público en general, tuvieran opciones de conseguir alguna entrada para ver a Williams.
La verdad es que cuando los conciertos se pusieron a la venta al público en general, las entradas se agotaron en menos de una hora, demostrando la expectación que genera el maestro John Williams en Europa, por donde no se prodiga tanto como en Estados Unidos (conciertos del Hollywood Bowl, Boston, Tanglewood…)
Es curioso pensar que John Williams estuvo en Europa en enero de 2020 en Viena, siendo éste el último gran concierto antes de que la pandemia empezará a golpear fuerte el continente. Igualmente, resulta curioso pensar que ahora que la pandemia está más o menos bajo control y la normalidad se está recuperando poco a poco, John Williams vuelva a Europa, ofreciendo el primer gran concierto que vamos a tener el continente en 2021.
Pero entremos en harina, y hablemos del concierto de ayer, jueves 14 de octubre, en Berlín. A continuación os dejamos el programa completo del concierto.
El concierto arrancó puntual a las 20h, de forma dinámica y potente con la grandiosa fanfarria compuesta por Williams para los juegos olímpicos de Los Ángeles de 1984 – Olympic Fanfare and Theme. Una pieza carismática y poco escuchada en concierto, con todo un despliegue de fuerza, sinfonismo e intensidad, que nos preparaba para el programa de proporciones olímpicas que íbamos a degustar a continuación.
Seguido llegaron casi 8 minutos de suite de Close Encounters of the Third Kind: Excerpts, donde si cerrábamos los ojos, casi podíamos rememorar la famosa película sólo con su música, y dejarnos llevar por esa sensación de lo desconocido, pero desde lo reconfortante del diálogo intergaláctico que ofrecen las conocidas 5 notas musicales.
A continuación, John Williams hizo una pausa y cogió el micrófono, para ofrecer una de las muchas explicaciones que tuvimos a lo largo del concierto. Además de agradecer el privilegio de estar dirigiendo a la Filarmónica de Berlín, uno de sus grandes sueños, comentó cómo le había sorprendido su primera visita a Berlín, al encontrarse una urbe totalmente opuesta a Los Ángeles: la gente va caminando o en bici a todos los lados en vez de en coche, y se pueden ver a familias con niños en los parques.
Seguido, presentó la siguiente pieza, Far and Away Suite, donde resaltó el marcado carácter irlandés de la música, el tema de amor, y la lucha que hay en la suite, elogiando la labor del concertino para obtener el sonido característico y necesario en la obra.
Como es habitual en él, John Williams dirigió todo el concierto de pie, batuta en mano, dando precisas indicaciones tanto a la orquesta en su conjunto, como a las secciones en particular, así como a los solistas. Subir la mano para pedir más fuerza a los metales, recoger el sonido de las cuerdas con un giro del brazo, o señalar con el índice o con una mirada y unas cejas levantadas a un solista, eran suficientes para guiar a la orquesta al punto que su música requería.
La siguiente pausa dio lugar a la presentación por parte de Williams del bloque de 3 piezas dedicado a Harry Potter: Harry Potter and the Philosopher’s Stone: Hedwig’s Theme, Nimbus 2000 & Harry’s Wondrous World. Tras un breve comentario de que en su día él no era consciente del tamaño y el éxito de la saga, hasta que le dijeron que había sido traducida a más de 64 idiomas, y que era la mayor exportación británica desde Los Beatles, arrancó la música.
El inconfundible comienzo de celesta en Hedwig’s Theme nos hizo imbuirnos de lleno en el mágico mundo de Harry Potter, cuyas bases musicales marcó Williams en sus primeras tres películas. Las piezas, que fueron interpretadas con breves pausas entre ellas, nos hicieron pasar por el jocoso y burlón Nimbus 2000 para llegar al tema central que impregna las aventuras de Harry Potter: Harry’s Wondrous World.
A continuación, llegaba otro breve comentario de Williams para hablar sobre su colaboración con Spielberg en Jurassic Park… que le hizo saltar a Indiana Jones… y nos recordaba que cuando acaben los conciertos de Berlín, se meterá de nuevo en su estudio para componer la música de la 5ª entrega, que tiene que estrenarse en verano de 2022.
Seguido, escuchamos Theme from Jurassic Park, con un majestuoso y delicado comienzo a la trompa, que cedía paso al arpa, antes de desplegar toda la riqueza sonora de la orquesta.
Con esta pieza, y tras 50 minutos de concierto, llegábamos al descanso, que nos ofreció una pausa de 20 minutos tras la que arrancó la segunda parte casi a las 21:15h.
Y nada mejor que volver a coger el pulso al concierto con toda la energía y grandiosidad de Superman March, en una perfecta interpretación de la orquesta, donde brillaron especialmente los metales y la percusión.
John Williams cogió nuevamente el micrófono para comentar el siguiente bloque dedicado a la música de Indiana Jones, y comentó especialmente el tema Indiana Jones and the last Crusade: Scherzo for Motorcycle and Orchestra, haciendo el chiste de que esa noche ¡sólo tenemos la orquesta y faltaba la moto! Comentó cómo compuso la pieza para que fuera dinámica y jocosa, una pelea poco seria, y cómo al ir al cine al estreno, se quedó sorprendido de que la motocicleta y los efectos de sonido se oyeran tanto que casi no se escuchaba la música. Por eso decidió que siempre que pudiera, iba a incluir esta pieza en sus conciertos, y aquí la teníamos.
Así, la orquesta arrancó una precisa y dinámica interpretación del Scherzo for Motorcycle and Orchestra, para luego dar paso a un tierno y delicioso Indiana Jones: Raiders of the Lost Ark: Marion’s Theme, como contrapunto, llevando luego el final del bloque de Indy a lo más alto con Indiana Jones: Raiders of the Lost Ark: The Raiders March. ¡Adrenalina en estado puro y otra de las grandes ovaciones de la noche! Comentar que en esta pieza (al menos en esta, y puede que quizás en alguna otra también), John Williams dirigió de memoria, sin usar la partitura. Fue algo cuando menos curioso, que pude ver desde donde estaba sentado.
A continuación, el chelista de la orquesta Bruno Delepelaire, se ubicó en primera fila del escenario junto al podio del director, y comenzó con las primeras notas del Elegy for cello and orchestra, una pieza que tal y como el propio Williams había descrito antes, expresaba deseo y esperanza en tiempos de dolor, pero también perdón. Una pieza melódica, suave, sentimental y muy expresiva, con un chelo y una orquesta perfectamente sincronizados, que Williams tuvo el acierto de retener con un par de segundos de silencio al final, batuta en alto, para dejar que calara lo que habíamos escuchado.
Y así el concierto llegaba al bloque final que estaba dedicado a Star Wars, con Solo: A Star Wars Story: The Adventures of Han, energía y dinamismo con todo el sabor de la saga original. Seguido, un sublime y carismático Star Wars: Episode V – The Empire Strikes Back: Yoda’s Theme, que dio paso a toda la pompa y circunstancia de Star Wars: Episode IV – A New Hope: Throne Room, para acabar con la potencia de su archiconocido End Title.
Eran casi las 22:10h y el concierto “oficialmente” había terminado, pero un publico en pie aplaudiendo a rabiar no iba a dejar que eso acabara así. Y Williams no se pudo resistir. Salió de nuevo, y contó la anécdota de que en la primera película de Star Wars a la que puso música, pensaba que Luke y Leia acabarían siendo pareja e hizo un tema que sería el origen de esta relación. Pero dos años después, en la continuación, se llevó la sorpresa de que eso no iba a ser posible (“¡Y George Lucas no me dijo nada cuando le presenté la música!”, confesaba). Esta divertida introducción, dio paso al maravilloso tema Star Wars: Episode IV – Princess Leia’s Theme, genialmente interpretado.
Otra ronda de aplausos del público consiguió arrancar un segundo bis: el poderoso y energético E.T. The Extra-Terrestrial – Flying Theme, que nos hacía sentir que surcábamos los cielos en bicicleta, llegando a tocar la luna. El concierto ya había terminado, y lo había hecho en su punto más álgido. No había nada que pudiera superar a este tema como final… ¿o sí?
La insistencia del público consiguió arrancar un tercer y último bis, Star Wars: Episode V – The Imperial March (Darth Vader’s Theme), una pieza muy compleja para un final de concierto, especialmente para una sección de metales que ya había dado todo de sí, pero que consiguió superar con nota este grandioso final (¡la Berliner Philharmoniker no quiso ser menos que la Wiener Philhamroniker!).
Eran casi las 22:30h cuando John Williams salía a saludar por cuarta y última vez, mientras el público seguía aplaudiendo en pie. Williams hico el gesto de “hay que irse a dormir”. ¡Y así lo hicimos, con un estupendo sabor de boca!
EN RESUMEN
John Williams ha hecho nuevamente historia, y ya es el segundo año consecutivo. Si bien en 2020 consiguió abrir las puertas de la música de cine a una orquesta tan vinculada a la música clásica como la Wiener Philharmoniker, ahora en 2021 hacía lo propio con la Berliner Philharmoniker, también íntimamente ligada a programas donde la música de cine no suele encontrar cabida.
Una interpretación fabulosa de la Berliner Philharmoniker, una dirección estupenda de John Williams, que no se resiente de su avanzada edad (no olvidemos que cumple 90 años en febrero de 2022), y un público con muchas ganas de disfrutar de su música, fueron los ingredientes necesarios para hacer de la velada de anoche algo inolvidable.
Inolvidable… pero afortunadamente no irrepetible, porque volveremos a ver a Williams subirse al escenario dos días más en Berlín: hoy viernes 15 y mañana sábado 16, y, además, el concierto del sábado 16 será retransmitido en digital en la siguiente dirección:
https://www.digitalconcerthall.com/en/concert/53783
Y por si todo esto fuera poco, John Williams ha anunciado recientemente que vuelve a Europa en 2022, concretamente a Milán (leer más).
2020 Viena, 2021 Berlín, 2022 Milán…. Ojalá podamos seguir disfrutando y celebrando a John Williams en Europa por muchos años más, de la mano de orquestas de gran prestigio como las presentes. ¡Estamos seguros de que hay más países Europeos dispuestos a acoger al maestro en sus salas de conciertos!
Artículo y fotos por Gorka Oteiza
Fotos adicionales Javier Quilis