Film Symphony Orchestra – Gira Krypton – Bilbao 2023 [Resumen Concierto]
Hace poco más de una semana, la imparable Film Symphony Orchestra comandada por el incansable Constantino Martínez Orts, pasó por el Palacio Euskalduna de Bilbao con motivo de su gira de conciertos ‘Kyrpton – Héroes y Superhéroes’. Una gira a la que ya le quedan pocos conciertos y va tocando a su fin (leer más).
Nuestros compañeros Felipe Múgica y Carmen Ruiz acudieron a dicho concierto, y a continuación nos traen dos crónicas muy interesantes y complementarias, que nos cuentan cómo vivieron la experiencia.
Film Symphony Orchestra - Gira Krypton - Bilbao por Felipe Múgica
El 4 de junio se celebró en el Palacio Euskalduna de Bilbao el concierto de la Film Symphony Orchestra perteneciente a su gira Krypton. El programa consistía en una variada selección de temas procedentes de películas de tema superheroico, tanto de Marvel como de DC, a lo que se sumaban varios temas de héroes del pasado, como Braveheart o Robin Hood. Un concierto de casi 3 horas, descanso incluido, donde se combinaban las interpretaciones de la orquesta con trabajados juegos de luces en sincronía con la música y entusiastas presentaciones por parte de su director de orquesta, Constantino Martínez-Orts. Un concierto muy disfrutable, donde no faltaron guiños con el público e incluso un concurso al comienzo de la segunda mitad.
Pero antes de entrar en harina, empecemos echando un poco la mirada atrás…. Después de varios años de prolongada ausencia en la capital de Bizkaia (a lo que se sumó la llegada de la pandemia), en 2022 la Film Symphony Orchestra volvía a ofrecer un concierto en Bilbao. Poco más de un año después, la FSO ha vuelto, lo que hace pensar que su fórmula de conciertos de música de cine para un público mayoritario ha funcionado entre la audiencia. Y es que ese es, para disgusto de los puristas más recalcitrantes de la música de cine, el enfoque elegido para este tipo de conciertos: una interpretación a cargo de la orquesta, acompañada de efectos de luz que se mueven en sincronía con las notas musicales y con unas entusiastas presentaciones a cargo de su director de orquesta y alma mater Constantino Martínez-Orts.
En la gira de este año, a la que han otorgado el título de “Krypton”, se ha optado por una selección de temas musicales pertenecientes a películas de superhéroes en su mayoría (tanto de Marvel como de DC) sumado a algunos temas de héroes históricos (como Braveheart o Lawrence de Arabia) o fantásticos (como Conan el Bárbaro). Una selección rabiosamente comercial como se puede apreciar, aunque no en vano hay que admitir que, como con cualquier artista, el objetivo siempre se trata de llenar teatros y más aún en un género musical, a priori, tan minoritario como sabemos que es la música de cine.
Es por ello que encuentro de agradecer las introducciones de Martínez-Orts antes de cada pieza. Aunque su discurso puede resultar algo excesivo y atropellado, considero de alto interés su explicación previa de cada compositor y/o película, dando a conocer detalles de sus autores y sus trayectorias o anécdotas acerca de cómo llegó a componerse tal o cual banda sonora. Se nota el entusiasmo por este tipo de música de su director y su esfuerzo para darla a conocer al público mayoritario, en su mayoría ajeno a ella, me parece de alabar.
A la búsqueda de una mayor sintonía con la audiencia (en comparación con cualquier otro concierto académico de música de cine o también de música clásica), se buscaba en alguna ocasión que los asistentes aplaudieran al ritmo de la música o se presentaba un juego de “Reconoce las BSOs en tiempo record”, con la promesa del sorteo de un viaje a Hollywood, como sucedía al comienzo de la segunda mitad del programa.
¿Y en cuanto a las interpretaciones o a la selección musical, la propuesta merecía la pena? Pues respecto a lo primero se nota el recorrido de la FSO en este tipo de conciertos y las interpretaciones no dieron lugar a reproche, aunque me gustaría resaltar la sentida presentación de Braveheart, en la que se podía percibir la debilidad del director por la obra, y la inesperadamente conseguida Black Panther, con la inclusión de percusiones africanas y voces (muy interesante la previa explicativa respecto a los tipos de instrumentos percusivos introducidos). La selección musical, al tratarse en su mayoría de temas épico-aventureros, podía adolecer de consistir en una acumulación de momentos álgidos que anulasen los unos a los otros. Pero, afortunadamente, la alternancia de temas más suaves como el mencionado de Braveheart (For the love of a princess) o la suite de Man of Steel aliviaban en parte el riesgo de acumulación de “momentazos”.
En total, contando con el descanso, fueron aproximadamente 2:45 horas de extenso concierto. La primera mitad acabó con el Iron man 3 de Brian Tyler (y la versión del tema central de Can You Dig It) y los Incredits de Los increíbles de Michael Giacchino, dos piezas muy moviditas que hubieran sido una forma estupenda de cerrar el concierto. Sin embargo, se optó por el Man of Steel de Hans Zimmer, más emocional que épico, en su lugar. Pese a todo, el verdadero cierre llegó en el bis (AVISO DE SPOILER POR SI ALGUIEN PREFIERE NO SABERLO), para sorpresa de pocos, con el Superman de John Williams (que ya había dado arranque al concierto con el tema de Krypton). A lo que se sumó el tema de la cantina de Star Wars, marca de la casa de la orquesta, según su director (FIN DEL SPOILER)
En definitiva, un concierto que dejó satisfechos a todos, por su extensión, por su selección musical, con la que resulta fácil de contentar al público mayoritario, por su presentación en escena repleta de atractivos juegos de luces (me atrevería a decir que en mayor cantidad que el año pasado) y por su búsqueda de conexión con los asistentes. La sala, en el Palacio Euskalduna estaba prácticamente llena, así que me arriesgo a vaticinar a que volverán a pisar Bilbao y Bizkaia en su próxima gira.
Film Symphony Orchestra - Gira Krypton - Bilbao por Carmen Ruiz
Bienvenidos a Krypton.
En el escenario a oscuras hay luces verdes. Luces de kryptonita. Pero los músicos entran armados con sus instrumentos para hacerle frente con su superpoder: la música.
El concierto comienza con un prólogo de corte ecologista al que acompaña el tema perfecto: “El planeta Krypton”, de John Williams porque, como Krypton, nuestro planeta se acerca a su destrucción. Pero llegan los héroes y los superhéroes. Los justicieros y todos aquellos que van a hacer de nuestro mundo un lugar mejor.
El primero de todos es Rodrigo Díaz de Vivar. El Cid. La obertura de Miklós Rózsa abre el repertorio en todo su esplendor con un inicio de viento metal al que sigue una imponente percusión y aires de pasodoble. Solemne, aventurera y llena de ímpetu. Incluso oiréis los caballos cabalgando por el escenario.
El recital continúa con el tema principal de Batman, de Danny Elfman, que se abre con tintes misteriosos para descubrir en una vorágine musical al caballero de la noche.
El tema principal de Ant-Man, de Christophe Beck demuestra que no hay héroe pequeño en un tema en tono desenfadado que promete diversión sin dejar por ello a un lado la fuerza musical en la presentación del personaje.
El siguiente héroe que se presenta es William Wallace, romantizado en cierto modo por el cine, pero un héroe real. La pieza se trata de “Por el amor de una princesa”, de James Horner. Una armonía dulce y envolvente y un sonido de cuerdas que te cala en lo más hondo. Uno de esos temas con los que te dejas llevar por su bella melodía. ¿Y por qué el tema de amor en lugar de algo más épico, más heroico? ¿Por qué no un tema de batalla? Pues porque el amor es parte de todo héroe.
Del romanticismo de Escocia, volvemos a Marvel con el tema principal de “Thor: el mundo oscuro”, de Brian Tyler. Música grandiosa como corresponde a un dios e interpretado de forma sublime en un tema épico y sonoro que no da un minuto de respiro.
Seguimos en la oscuridad con una suite de “El caballero oscuro”, de Hans Zimmer y James Newton Howard. La percusión te adentra en Gotham. Oscuridad y misterio en una imponente suite en la que no faltan melodías envolventes más intimistas con un halo inquietante.
Llegamos a los créditos finales del “Capitán América: el primer vengador”, de Alan Silvestri. Heroicidad en todo su esplendor en una magnífica marcha a la altura del personaje. Puro espectáculo.
Pasamos a “Robin Hood: príncipe de los ladrones”, de Michael Kamen. Una suite del que ya es todo un clásico del cine de aventuras. Y si estáis atentos, oiréis una pequeña parte del tema al que Bryan Adams puso su voz: “Everything I do”.
Le sigue una suite de Iron Man, de nuevo con Brian Tyler. Un comienzo tranquilo da paso a una potente percusión que presenta una soberbia pieza llena de intensidad.
Y termina la espectacular primera parte con el único tema del cine de animación. Una suite de “Los increíbles”, de Michael Giacchino da el punto de jazz a la función. Marchosa y divertida.
Volvemos del descanso con ganas de más. La segunda parte del concierto comienza con otro clásico: “Lawrence de Arabia”, de Maurice Jarre. Temazo de sobra conocido que te lleva de aventuras por el desierto en una sucesión de sonidos cautivadores.
A continuación, la orquesta nos deleita con el tema más intimista de la velada: los títulos principales de “Spiderman”, de Danny Elfman, pieza que no tiene el sonido espectacular ni la potencia de otras composiciones superheróicas, pero que crea complicidad con el oyente y le habla del trepamuros, de su historia. Grandiosa en su aparente sencillez.
Llega una historia triste y una música que eriza la piel: “El último mohicano”, de Trevor Jones con la que es imposible no emocionarse. El sonido de las cuerdas lleva al público al interior de una historia tan triste como hermosa.
Entra “Conan el bárbaro” de la mano de Basil Poledouris. La contundente percusión predomina, acompañada de viento metal, rememorando la crudeza de la época que tiene lugar. Tema recio con una exquisita parte de cuerdas que lo suaviza creando un magnífico contraste. Bárbaro como el mismo Conan.
La música española toma el escenario. Palmas y castañuelas presentan «La máscara del Zorro”, en una arrebatadora suite de James Horner, que incluye el tema interpretado por Mark Anthony y Tina Arena: “I want to spend my lifetime loving you”. Una delicia para los oídos. Maravillosa.
Si en la primera parte estaba el Capitán América, en esta segunda parte viene la Capitana Marvel. La música de Pinar Toprak cautiva a la audiencia con una pieza sencillamente espectacular y enérgica. Única compositora del repertorio y tema dedicado a todas las mujeres que, como Pinar Toprak, luchan por abrirse camino.
No puede faltar el tema principal de “Los vengadores”, de Alan Silvestri. Epicidad y aventura en un tema breve, pero altamente disfrutable.
El punto exótico de la velada lo pone Ludwig Göransson con una suite de “Black Panther”, con ritmos y sonidos de diversos instrumentos africanos, así como un coro que no deja a nadie indiferente.
El concierto finaliza con una espléndida suite de “El hombre de acero”, de Hans Zimmer, que incluye temas emblemáticos como “The flight” y “What are you going to do when you’re not saving the world?” Una partitura que además de presentar la heroicidad de Superman, se adentra en su interior y revela que, aun con sus superpoderes, es tan humano como cualquiera de nosotros. Magnífica pieza y no menos magnífica interpretación.
Por descontado, esto no puede acabar así. Todo el público está en pie aplaudiendo y quiere más. Siempre queremos más porque no nos cansamos de escucharles, porque ellos no solo interpretan las diferentes piezas: hacen que las vivas y que formes parte de ellas. Y hay tema de propina, que no puede ser otro que el de “Superman: The movie”, del incombustible John Williams. Todo un himno que no necesita presentación.
Y, por último –hasta el próximo concierto– la despedida fiestera que ya es marca de la casa: “La banda de la cantina” de John Williams para Star Wars.
Es complicado describir el buen hacer de esta orquesta porque alcanzan la excelencia y cualquier frase, cualquier adjetivo se quedan cortos y no alcanzan a expresar lo que se siente en un concierto suyo. Ellos hacen que formes parte de la música, que te mezcles con las notas que van a atraparte sin remedio. Porque ellos son música.
Mención especial para su director: Constantino Martínez-Orts, que presenta cada pieza con un entusiasmo arrollador y no puedes menos que dejarte llevar y empaparte con el conocimiento que trasmite como nadie.
Ese día, todos somos héroes. Gracias, FSO.
Artículos por Felipe Múgica y Carmen Ruíz
Fotos por Felipe Múgica, Carmen Ruíz y FSO
Album oficial FSO (enlace)